El Pasado viernes 4 de marzo, la
Parroquia de Santa María del Prado (Merced), acogió el II Pregón de la
Hermandad de Nuestra Señora de las Angustias, que estuvo a cargo del hermano de
nuestra Cofradía, D. Javier González Mora, que fue presentado por nuestro
Hermano Mayor, D. Emilio Martín Aguirre. Durante la pronunciación del mismo,
dedicó un capitulo a Nuestro Padre Jesús de la Bondad, de cuyo paso fue
costalero, y que a continuación reproducimos.
Nessum
Dorma al Señor de la Bondad
El futuro no es el lugar hacia donde nos
dirigimos. Es el lugar que estamos construyendo y que dependerá de lo que
hagamos en el presente. Por eso, como fue enseñada por el maestro Peter
Drucker, la mejor manera de prever el futuro es crearlo.
El futuro pertenece a aquellos que creen
en la belleza de sus sueños, dijo Eleanor Roosevelt. Y, parafraseando a Víctor
Hugo, no hay nada como un sueño para crear el futuro. Todo esto puede parecer
juego de palabras, pero se debe seguir monitoreando sus pasos en relación a sus
sueños y nunca adaptarse a ellos. Si prefiere ser más técnica, menos filósofa,
sustituye la palabra “sueños” por “metas”.
Dios no te hubiera dado la capacidad de
soñar sin darte también la posibilidad de convertir tus sueños en realidad.
Sin lugar a dudas, esto me lo terminó de
demostrar una noche de mayo, un sueño donde se me apareció mi Señor, un Sueño
para con mi Dios, un sueño de libertad, un sueño con el Salvador de mis
espaldas, la catedral de mi vida, fue una noche de mayo de 2006, un sueño
profundo, un sentimiento de emoción, esa noche de mayo, el Señor de la Bondad,
llamo a las puertas de mis sueños.
11 de abril de 2007 Miércoles Santo, no
parece haber pasado casi un año, de tu encuentro, sino mas bien, una vida, una
eternidad, por fin llegó el día, la ilusión me desborda, sudadera granate,
pantalones y zapatillas blancas solo se ve eso al fondo del guardapasos, se
oyen lamentos, se fragua la tensión, la lluvia es la peor enemiga en este
momento, yo estoy más calmado que nunca, mis sueños revelaron chicotas de oro
para esa tarde, allí me lo encuentro con todos sus guardabrisas encendidos,
tiene una luz mas especial que en Santo Tomas, es más grande todavía en su
paso, en su trono.
Sale ya el Señor, ya se repite el sueño
de mayo, ya suena la marcha real, ya revira el paso para buscar Lirio donde se
encuentra mi primer relevo, mi primera levanta al cielo, a tu cielo, sin duda
lo más grande que existe sobre la tierra, esa invasión de júbilo al verte tan
cerca de tu casa, se lanza el primer izquierdazo de amor, se reposa con menos
fuerza con el derecho, camino al primer saludo en san Pedro, le siguen plaza
mayor, saludo a Nuestra patrona, y ya huele, ya huele demasiado a la primera
luna llena de primavera, huele a mancha, a nazareno manchego, a incienso con
exceso de canela, estamos ya ante la cúspide de la Semana Santa Ciudadrealeña,
entra el señor de la Bondad en el pasaje, la bulla, el incienso no dejan ver,
los izquierdos se reducen, el vocero no puede trabajar del jaleo, Chefo!! No se
te oye! los oles de dentro y de fuera no dejan de oírse, la banda se crece, la
corneta en la merced gana el doble de sonido, cada vez se ve más luz, la banda
lo ve, sabe que está el Cristo cerca de su Madre de las Angustias un año más
para bendecir a sus Nazarenos y a sus costaleros.
Ya esta revirando el Señor, la cara del
Cristo flagelado cambia, ya no muestra cara de sufrimiento, ya muestra cara de
amor, ya muestra cara de sentimiento, desde la segunda trabajadera no se ve
nada, estoy en mi nube en mi reflexión, en mi penitencia, ya solo veo el
bacalao de mi hermandad, ya veo a mi gente, ya veo a mi amigo Emilio Martin con
su vara, a mi familia, a mi padre y a mi madre más que nunca, que nos esperan
con cariño y respeto, de repente se hace el silencio entre el público, es el
momento de disfrutar del momento, el encuentro de los ferroviarios se palpa en
una imagen, es el momento de la noche de Ciudad Real, suena el solo del corneta
30 segundos de compás sin aire, ya está el paso revirao, ya está listo para dar
el izquierdo de la esperanza, el derecho de la fe, y el caminar hacia el
consuelo de una madre angustiada:
Apenas despunta las 7 de la tarde
Un romano danzando a caballo impetuoso
con sus plumas al viento
asoma por Quevedo despertando al
vecindario
asoma al frente el sol de Ciudad Real,
el Salvador de los hombres
atado a una mísera columna
en el suelo unas zapatillas de esparto
esperan a unos pies descalzos
para dejarse la suela en el pavimento
ciudad realeño
y darle magistrales izquierdos de amor
a su humilde y bondadoso Nazareno
Despierten ciudad realeños, despertad,
Nessum dorma
Que sale la Hermandad del sentimiento
Cigarrero
Tres golpes secos con la Puerta Toledo
Como testigo,
Anuncian el cielo,
Anuncian el vuelo
Padre Nuestro que estás en el cielo,
Llevemos tu cara morena,
Asomarse a la Puerta de la Merced,
Que cuando las Angustias te mire
Y te vea sufrir con esa dulce
resignación,
No se le ocurre más que enorgullecerse
De su hijo, porque no hay en este mundo,
Nadie más valiente que tú
Buenas noches Jesús,
Contigo quiero andar por la vereda
Tu mi camino, mi libertad, mi vida,
Tú la bondad y el consuelo firme que nos
queda,
Venid resto de España,
Venid a la plaza de la Merced
Contemplar al Padre Creador
De todas las maravillas que va camino
De encontrarse a su consuelo de la
Merced,
Llevando 39 latigazos bajo sus espaldas
Salgan a su encuentro, vean al rey del
mundo
Atado a la columna,
No desfallezcas Jesús,
Que hay un pueblo entero
Que quiere hacer de cirineo
Que no se resquebrajen tus pies
descalzos
Con las piedras del camino,
Que para eso va tu bulla de oro,
sembrando claveles rojos a tu paso,
si caes del dolor,
Aquí está tu costalero para levantarte
más al cielo que nunca
para que tu cara manchega no roce al
suelo,
Jesús y su madre se despiden para volver
a su casa
Mientras la banda apura sus últimos
compases
Jesús se despide de sus Angustias
mirando al pueblo a la cara
Antes de perderles de vista hasta el año
que viene,
Déjanos navegar en tus lagrimas
Angustias,
Corriente abajo por tus mejillas
Hasta naufragar en tus labios
Que tu Cristo de la Bondad pronto se
reunirá con nuestro Dios en los cielos,
Que no queremos verte triste María,
Ni en penas ahogarnos,
Deja de llorar madre mía sin consuelo ni
descanso,
Que quiero enjuagar tu llanto, y calmar
tu agonía,
Que si tienes que llorar, riega este
valle de lágrimas
Anegando nuestros campos manchegos,
Pero que sea con lágrimas de alegría
Que no quiero que sufras tanto!!