La
Flagelación tiñó de blanco y granate las calles de Ciudad Real para llevar a
quienes lo necesitan el Consuelo de la Madre y la Bondad de Cristo.
A las siete en punto de la tarde de este
Miércoles Santo se abría la puerta del Guardapasos de Ciudad Real para que los
fieles y devotos de la ciudad observaran en primera persona el esplendor y la
belleza de Nuestro Padre Jesús de la Bondad y María Santísima del Consuelo,
ambos pasos pertenecientes a la hermandad conocida como La Flagelación.
De extraordinaria belleza y gran
sincronización, la hermandad ha conseguido remover las entrañas de fieles y
devotos, a lo largo de la procesión por las calles de la capital provincial.
La banda de cornetas y tambores Solera
Musical de Ciudad Real abría el desfile procesional y tras ella, la cruz guía
anunciaba la llegada del misterio con el Cristo de la Bondad, que narra la
flagelación de Jesucristo, una de las iconografías religiosas más representadas
y representativas del cristianismo.
45 costaleros portaron la expresiva
escena de Cristo flagelado, que muestra una imagen de Jesús atado con una soga
mientras lo azotan los verdugos y los romanos que el paso lleva tallados. La
banda de cornetas y tambores Virgen del Prado-La Pasión de Ciudad Real abría
paso al misterio.
Media hora después del arranque de
Cristo ha sonado el himno de España, interpretado por la Asociación Musical
Mozart de Aldea del Rey, que anunciaba la salida de la Virgen del Consuelo,
obra de Ramos Corona. El palio, portado por 35 costaleros, transmite serenidad
y consuelo a los devotos que lo necesitan.
Entre los estrenos de este año se
encuentran los cuatros ciriales y la pértiga en metal plateado de la orfebrería
Orovio de Torralba de Calatrava, que acompañan al paso de palio.