La salida procesional de Jesús de la Bondad y la Virgen del Consuelo
Si es Miércoles
Santo, la Cofradía de la Flagelación de Ciudad Real está en las calles
brillando con la estación de penitencia y sus dos pasos -Jesús de la Bondad y
la Virgen del Consuelo-, tal como ha sido este 5 de abril. Varios cientos de
cofrades de una de las hermandades más jóvenes de la capital ha puesto en
escena uno de los relatos más sagrados e históricos del Evangelio, que narra la
flagelación de Jesús como castigo previo a su ejecución por crucifixión.
Pocos minutos después de las 19 horas, las puertas del guardapasos de la calle Quevedo se han abierto para dar salida a la cruz de guía y a los primeros emblemas de la hermandad, portados por algunos de los nazarenos, vestidos con la túnica blanca, escudo bordado en el capillo, cinto granate, sandalias negras, calcetín blanco y medalla colgada al cuello.
Momentos después, todavía dentro del recinto, las voces del capataz José Luis Serrano para estimular a los 48 costaleros han dado paso a una estremecedora “levantá” del paso de misterio, donde se ve a Jesús condenado a muerto, junto a dos verdugos, uno romano a caballo y otro a pie, además de un patricio.
Al franquear la
puerta hacia el exterior, el paso de Nuestro Padre Jesús de la Bondad,
sobre una cubierta floral de rosas rojas, iris, astromelias y cardos dragón, ha
sido recibido por cientos de personas en el atrio y miles en la calle al son
del himno nacional, interpretado por la Banda de Cornetas y Tambores Cristo de
la Columna, "Los Coloraos", de Daimiel.
Con un tiempo
espléndido, el paso del Señor ha inaugurado su camino con un andar sobrio y una
cadencia rigurosa entre la devoción de los ciudarrealeños, que se han echado a
la calle para admirar la iconografía, este año con diversos estrenos en la
canastilla, las cartelas y candelabros delanteros, además de los correajes de
cuero de uno de los sayones y la ropa del sanedrita.
Inicio emotivo
Por su parte,
el paso de palio de María Santísima del Consuelo, precedido por el
grupo joven de la hermandad y un grupo de niños, algunos de corta edad, también
ha tenido un inicio emotivo en la carrera procesional, tras la llamada del capataz
José María Pastor y la levantá al filo de las 19,30 horas.
La Virgen también ha salido bajo la interpretación de la Marcha Real, a cargo de la banda por parte de la banda sinfónica de música de Miguelturra, que, a pocos metros de ocupar la calle, ha tocado un solo de flautín y caja dentro de la composición ‘Rocío’ mientras la Dolorosa era “bailada”.
Ha sido uno de los primeros momentos de emoción de la carrera, al que han seguido, a lo largo de las más de cinco horas que ha durado, el saludo de los dos pasos a la hermandad de la Soledad en San Pedro, a las Angustias en la Merced, y a las Hermanas de la Cruz -con cánticos-, además del homenaje del Cristo a la Virgen del Prado en su Camarín.
Impresión también han causado la “petalá” de rosa al paso de la Virgen del Consuelo en el Pasaje de la Merced, que este año ha lucido un tocado de encaje nuevo, regalo de un grupo de hermanos, y la corona de plata sobredorada, además de la saya blanca bordada en oro.
La belleza del conjunto mariano ha sido potenciada con el exorno floral de rosas blancas, astromelias, clavelinas, flores de cera y orquídeas doradas, y por las velas que han alumbrado a la imagen con los lemas ‘Consuelo para el amor’ y "Sagrario de bondad".
Algunos de los
cofrades han desfilado descalzos, con o sin calcetines, y numerosos han portado
un rosario para su recogimiento devoto durante la procesión. Los más pequeños,
por su parte, han portado cestas con dulces y estampas de los titulares de la
hermandad, y con su espontaneidad han hecho las delicias de los ciudarrealeños
que han llenado el centro de la ciudad para contemplar la riqueza patrimonial
cofrade y vivir con recogimiento el mensaje de humildad y caridad de Cristo. El
tiempo primaveral ha acompañado y ha reforzado la expectación del público.
La procesión ha estado presidida por Antonio Ruiz Pozo, párroco de Santo Tomás de Villanueva, y también ha acudido Francisco Cañizares, candidato del PP, que portaba un cetro. Puesto especial han tenido cinco agentes de la policía local, dos ataviados con los trajes de gala antiguos, que es Hermana Mayor Honoraria.
Fuente: https://www.lanzadigital.com/provincia/ciudad-real/ciudad-real-se-vuelca-con-la-flagelacion/